A lo largo de Via Nino Bixio, en el lado meridional y al principio del lado occidental, se conservan algunos tramos discontinuos de los muros comunales proyectados en el siglo XII. En los segmentos meridionales se abren tres poternas relativas a la fase más antigua de construcción de la parte en estudio; mientras que otros puntos de paso de más breve ejecución pertenecen a momentos sucesivos de transformación. En la esquina sur-occidental el paramento está formado por piedras desbastadas que se unen a una gran abertura con arco de medio punto construido con piedra escuadrada, correspondiente a la que en las fuentes se conoce como Puerta de San Pedro.
En el resto del lado meridional se leen franjas constructivas relativas a fases diversas que se remontan a los siglos XIII-XIV y realizadas en parte en piedra y en parte en ladrillo, empleado también para la coronación superior con almenas.
Las diversas reconstrucciones presentes son atribuibles tanto a la época moderna, como las partes del paramento construidas en ladrillo combinado esporádicamente con asperón, como a la época contemporánea, como la restauración en caliza de forma irregular en la parte central inferior de los muros.
A raíz de las excavaciones realizadas en 2005 para la construcción del parking subterráneo de la Plaza Vittorio Emanuele, que constituye la desembocadura oriental de la citada calle, se han hallado fragmentos pertenecientes a la antigua Puerta de San Gil y al puente al sur del recorrido. Dichos elementos, atribuidos al siglo XII, se encuentran en el límite sur del eje viario de la Baja Edad Media que llevaba a la principal travesía del río, con el mismo nombre que la puerta y correspondiente al actual Corso Italia.