Chiesa di Santa Cecilia
La Iglesia de Santa Cecilia fue fundada en 1102 por iniciativa de los monjes Camaldulenses de la vecina San Miguel en Borgo, en un terreno donado a ellos por la familia Visconti, y consagrada en 1107 por el obispo Pietro.
El edificio presenta una planta con una sola nave, con campanario “suspendido” en la esquina sur-occidental interior, que se apoya en dos lados sobre los perimetrales de la iglesia, mientras que la esquina opuesta está sostenida por una columna. La fachada, a modo de cabaña, tiene la parte inferior hasta la altura del arquitrabe del portal principal con dovelas de piedra, mientras que la parte superior es de ladrillo y está rematada con una coronación de pequeños arcos ciegos bajo la cornisa del tímpano. Un luneto de medio punto y una bífora, bastante retocada, ambas definidas por ladrillos moldeados y decorados, marcan el espacio de la fachada. En el lado derecho, dos pequeños portales con arquitrabe lítico y luneto con una franja de ladrillos marcan dos fases diferenciadas en la construcción del complejo arquitectónico.
En la fase final se completó el campanario, que se concluyó en los años treinta del siglo XIII y presenta pilastras angulares y aberturas en los planos de monóforas y bíforas de luz creciente. Conserva tres campanas del siglo XIV, de las cuales una se remonta al año 1340.
La Iglesia de Santa Cecilia se caracteriza, como otras iglesias pisanas, por la presencia de cuencos de cerámica de producción local y de procedencia mediterránea insertados en los lados a modo de decoración arquitectónica. Las cerámicas están insertadas en serie a lo largo de los salientes de la fachada y el perimetral meridional, definen los lados de la bífora central y enriquecen las series de pequeños arcos que delimitan los planos del campanario.
La iglesia, duramente castigada por los bombardeos de la última guerra, ha sido completamente